Energía con chips de Madera

Energía con chips de Madera

Conoce como se genera energía a traves de chips de madera

La generación de energía a partir de biomasa forestal, como chips y pellets de madera, presenta una oportunidad de crecimiento y empleo con una baja huella de carbono en Argentina.

En el país, existen grandes volúmenes de biomasa forestal sin aprovechar, provenientes de subproductos de la industria maderera y de residuos de plantaciones y bosques nativos, los cuales podrían utilizarse para generar energía térmica y eléctrica.

Esta alternativa ofrece una opción más competitiva y sostenible para hogares, comercios e instituciones. En cuanto a la generación de energía eléctrica, se han realizado inversiones en plantas de energía basadas en chips de madera en diferentes regiones de Argentina. Estas iniciativas contribuyen a aumentar la participación de fuentes renovables en la matriz energética del país. Además, el consumo de energía térmica en Argentina representa el 65% del total.

Los chips y pellets de madera se han utilizado exitosamente en Europa, Japón y Corea como sustitutos de combustibles fósiles en calderas y estufas de alta eficiencia, experimentando un rápido crecimiento para cumplir con los objetivos de energía renovable.

Además de ser una fuente de energía renovable y neutra en carbono, su producción y consumo ha generado empleos significativos tanto en áreas rurales como urbanas. El uso de pellets y chips en calderas permite reducir los costos energéticos y mejorar la competitividad, especialmente en aquellas áreas que no tienen acceso a la red de gas natural.

En Argentina, ya existen casos exitosos de uso de pellets en hoteles y comercios, como en Puerto Iguazú, donde la mayoría de los hoteles utilizan calderas de pellets para calefacción y agua caliente.

Para desarrollar el mercado interno de pellets y chips, se requiere financiamiento adecuado, mayor información para los usuarios sobre los beneficios de la biomasa como combustible y la implementación de incentivos apropiados. En Europa, la facilitación de la adquisición de estufas y calderas de pellets ha impulsado su difusión y se ha convertido en la forma más popular de calefacción en hogares y comercios.

Además de la generación de energía a partir de chips y pellets de madera, otra técnica prometedora para aprovechar la biomasa forestal es la pirolisis, la cual es un proceso termoquímico que descompone la biomasa en ausencia de oxígeno, generando biochar, gases y líquidos aprovechables.

En el contexto argentino, la pirolisis ofrece una oportunidad adicional para utilizar eficientemente la biomasa forestal sin aprovechar. Los subproductos de la industria maderera y los residuos de plantaciones y bosques nativos podrían ser sometidos a pirolisis para obtener biochar de alta calidad. El biochar resultante puede utilizarse como un sumidero de carbono a largo plazo en aplicaciones agrícolas, mejorando la calidad del suelo y promoviendo la captura y almacenamiento de carbono.

Además, durante el proceso, se generan gases y líquidos que pueden ser utilizados como combustibles o materias primas para la producción de productos químicos. Estos subproductos gaseosos y líquidos pueden contribuir a la generación de energía térmica y eléctrica, ofreciendo oportunidades adicionales de aprovechamiento de la biomasa forestal.

La integración de la pirolisis en las estrategias de aprovechamiento de la biomasa forestal permitiría maximizar el potencial de generación de energía renovable, reducir aún más las emisiones de carbono y promover una gestión sostenible de los recursos forestales en Argentina. Además, la implementación de la pirolisis podría generar empleos adicionales en las áreas rurales y urbanas, impulsando así el desarrollo económico y social.

En conclusión, la combinación de la generación de energía a partir de chips y pellets de madera junto con la aplicación de la pirolisis en la biomasa forestal brinda a Argentina una oportunidad integral para avanzar hacia una matriz energética más sostenible. Mediante el aprovechamiento de la biomasa forestal de manera eficiente, el país puede expandir sus fuentes renovables, reducir las emisiones de carbono, promover el empleo y mejorar los costos energéticos en diversas regiones.

El sector forestal en Argentina tiene la oportunidad de desempeñar un papel clave en la transición energética del país. Esto se lograría mediante el aprovechamiento de la biomasa forestal para generar energía térmica y eléctrica. Al hacerlo, se abrirían nuevas fuentes de energía renovable y se reducirían las emisiones de carbono, lo que contribuiría a mitigar el cambio climático.

Además de los beneficios ambientales, esta transición también tendría un impacto positivo en la economía. El aumento en la producción de energía renovable a partir de la biomasa forestal crearía nuevas oportunidades de empleo en el sector forestal y en las industrias asociadas. También se espera que mejoren los costos energéticos en diferentes regiones del país, lo que podría beneficiar tanto a los consumidores como a las empresas.